De acuerdo a los datos del padre Gabriel Guarda, eminente historiador valdiviano, ya en 1870 inmigrantes alemanes levantaron sus residencias en esta calle. Para comienzos del siglo XX fue construida la calle, que recibió el nombre de Esmeralda.
Desde los años noventa distintos restaurantes y centros nocturnos comenzaron a instalarse en las antiguas casas de estilo alemán. En la actualidad el barrio Esmeralda es el centro de la vida nocturna valdiviana, recibiendo todos los fines de semana a cientos de visitantes, junto a ser un lugar donde se concentran distintos servicios y una creciente oferta comercial.
El Grupo Asociativo Local cuenta con la participación activa de 16 empresarios. En conjunto se han organizado distintas actividades, como el lanzamiento de la feria gastronómica Ñam Valdivia, en noviembre de 2015, a la cual el barrio Esmeralda se sumó como auspiciador a través del programa de Barrios Comerciales. También a fines del 2015 los empresarios del barrio quisieron sumarse a la Semana de la Pyme, organizando una tarde de descuentos. Entre noviembre y diciembre de 2015 se desarrolló la asesoría de identidad y marca, resultando en el logo del Barrio Esmeralda.
Durante el verano de 2016, todos los miércoles de febrero, se llevó a cabo el Boulevard Esmeralda, organizado por el municipio valdiviano. Para la actividad, los empresarios gastronómicos y de entretenimiento sacaron las mesas a la calle, se instaló música ambiental y se invitó a distintos artistas que dieron vida y transformaron la calle en un paseo peatonal.
En la actual etapa denominada "revitalización del barrio", se invirtieron cerca de 11 millones de pesos en la mejora del entorno urbano comercial con terrazas, jardineras y otras obras, además de la implementación de un plan de marketing para impulsar el barrio en temporada baja.
Todas las líneas de colectivos y autobuses llegan a la esquina de Esmeralda con Arauco, que es uno de los centros neurálgicos de la locomoción en Valdivia.